Los hermanos, animadores y agentes de pastoral juvenil en Venezuela vivimos en familia, compartiendo todo, siguiendo a Jesús de Nazaret cada día y allí donde estamos. Con el pueblo de Dios, en solidaridad con los más necesitados; María es nuestro modelo.
Los hermanos maristas evangelizamos educando, acompañando y educando cristianamente a los jóvenes y niños, sobre todo a los más desatendidos. Compartiendo vida con los Laicos: docentes, padres de familia, niños y jóvenes. Los asesores, guías, y animadores, junto a los hermanos, llevan las riendas de la Pastoral Juvenil Marista.
A los jóvenes, El Padre nos llama desde esas realidades que nos rodean, y que muchas veces no sabemos ver: nos hemos acostumbrado a ver que las cosas “siempre han funcionado igual” pero creemos, y queremos, que algún día sonará otra voz. ¡No! Él nos llama aquí y ahora, en esas cosas que jamás cambiarán si no somos capaces de sumergirnos en ellas hoy, con una presencia creativa.
Marcelino intentó dar respuesta a todas las necesidades que encontraba en su camino. ¿Qué hacemos nosotros? ¡Basta ya de solo seguir soñando en el futuro! El Padre está a nuestra puerta llamando, ahora: en nuestros jóvenes, en el anciano sin casa, en la parroquia desatendida… ¿Le abriremos?
Sorprendámonos de la sencillez de nuestro Dios: ¡Sólo pide de nosotros unos ojos unos oídos que escuchen, unas manos abiertas y un corazón acogedor y dispon continuar su obra aquí y ahora. ¡Ojalá sea cierto, entre los animadores maristas pedía el padre Champagnat a los hermanos en el testamento espiritual: “No ha vosotros sino un solo corazón y un mismo espíritu, y que se pueda decir de vosotro cómo se aman”!
“Para mi ser animadora marista (en este caso timonel) significa ser un ejemplo para nuevas generaciones maristas que sienten un interés en profundizar sus va animador marista es alguien que día a día va aprendiendo a educar a estas perso de una manera de crecimiento personal como espiritual enfocado en Jesús y practicar los valores del servicio y la humildad.” (María Laura Reymy, timonel en formación. 17 años)
Los primeros Hermanos Maristas llegaron a Venezuela iniciando en la ciudad de Maracaibo en el mes de septiembre del año 1925. Continuaron el carisma de San Marcelino Champagnat inicialmente en las siguientes obras:
Colegio Champagnat (Caracas, 17-9-1951)
Colegio San José (Maracay, 10-1-1995)
Colegio Juan XXIII (Cardón, 16-9-1963)
Colegio Hno. Ildefonso Gutiérrez (Maracaibo, 10-9-1966)
Escuela Granja Santa Catalina (Delta Amacuro, 9-1989)
Comunidad Catequista de Tucupita (Delta Amacuro, 2-1-1991)
Comunidad Catequista de Biruaca (Apure, 15-9-1996)
Comunidad Primero de Mayo (Machiques, 08-9-1997)
Casa Provincial (Carcas)
Casa de Acogida (Carcas)
Casa de Formación (Los Teques)
Casa de Convivencias (Los Teques)
Tipos de presencias: Escuelas, colegios, escuelas técnico-profesionales, escuelas granjas, niños de la calle, formación de catequistas, indígenas, lugares de misión, voluntariado, casa de convivencias, movimientos apostólicos.
Necesitamos Hermanos Maristas que quieran seguir a Jesús de Nazaret con radicalidad, porque:
– Muchos jóvenes y niños están pidiendo que se les presente a Jesucristo y se les eduque integralmente.
– Dios sigue llamando a los jóvenes a vivir este estilo de vida cristiana.
– La espiritualidad apostólica marista es un don para el mundo.