Cual es la Misión

Los hermanos, animadores y agentes de pastoral juvenil en Venezuela vivimos en familia, compartiendo todo, siguiendo a Jesús de Nazaret cada día y allí donde estamos. Con el pueblo de Dios, en solidaridad con los más necesitados; María es nuestro modelo.

Los hermanos maristas evangelizamos educando, acompañando y educando cristianamente a los jóvenes y niños, sobre todo a los más desatendidos. Compartiendo vida con los Laicos: docentes, padres de familia, niños y jóvenes. Los asesores, guías, y animadores, junto a los hermanos, llevan las riendas de la Pastoral Juvenil Marista.

“Para mí ser animador marista es y ha sido la oportunidad de conocer lo más maravilloso que hay en el mundo el amor de dios y su expresión en cada joven, en cada persona, en cada espacio, ha significado conocer un camino de servicio y de fe en el que continuamente reflexiono y busco motivaciones para dar lo mejor de mí al servicio de otros. Ser animador ha significado descubrir mis carencias, mis debilidades, mis fortalezas y saber que hay mucha esperanza de cambiar las cosas en nuestra realidad en resumen ser animador marista me ha cambiado la vida, me ha ayudado a crecer en la fe, me ha impulsado a entender que el servicio es un estilo de vida un estilo de vida como el de Jesús en el que estoy llamado constantemente a abandonar mis comodidades y romper con ese egoísmo interno que nos aleja de amar al prójimo como lo dice el evangelio ser animador marista significa para mi escuchar como lo hizo la buena madre el llamado de dios y responder como lo hizo Champagnat con generosidad y dando lo mejor de nosotros (Eduardo Lossada, asesor de Pastoral Juvenil Marista, animador Marista, 25 años)

A los jóvenes, El Padre nos llama desde esas realidades que nos rodean, y que muchas veces no sabemos ver: nos hemos acostumbrado a ver que las cosas “siempre han funcionado igual” pero creemos, y queremos, que algún día sonará otra voz. ¡No! Él nos llama aquí y ahora, en esas cosas que jamás cambiarán si no somos capaces de sumergirnos en ellas hoy, con una presencia creativa.

“Para mi ser animadora, es un servicio a los más jóvenes y las nuevas generaciones que vienen después de mí, es poder enseñar lo que yo aprendí en los movimientos juveniles y acompañar en la formación de los nuevos chamos a ser líderes en un mundo lleno de falta de valores y carente de Dios. Ser animadora, significa responsabilidad, amor y servicio. Es un granito de arena que puedo dar para la construcción de un mundo nuevo basándome en los valores, evangelios y principalmente en Dios.” (Kemberly Rodríguez, animadora marista, guía de Amigos en Marcha, 18 años)

Marcelino intentó dar respuesta a todas las necesidades que encontraba en su camino. ¿Qué hacemos nosotros? ¡Basta ya de solo seguir soñando en el futuro! El Padre está a nuestra puerta llamando, ahora: en nuestros jóvenes, en el anciano sin casa, en la parroquia desatendida… ¿Le abriremos?

Sorprendámonos de la sencillez de nuestro Dios: ¡Sólo pide de nosotros unos ojos unos oídos que escuchen, unas manos abiertas y un corazón acogedor y dispon continuar su obra aquí y ahora. ¡Ojalá sea cierto, entre los animadores maristas pedía el padre Champagnat a los hermanos en el testamento espiritual: “No ha vosotros sino un solo corazón y un mismo espíritu, y que se pueda decir de vosotro cómo se aman”!

“Para mi ser animadora marista (en este caso timonel) significa ser un ejemplo para nuevas generaciones maristas que sienten un interés en profundizar sus va animador marista es alguien que día a día va aprendiendo a educar a estas perso de una manera de crecimiento personal como espiritual enfocado en Jesús y practicar los valores del servicio y la humildad.” (María Laura Reymy, timonel en formación. 17 años)

Los primeros Hermanos Maristas llegaron a Venezuela iniciando en la ciudad de Maracaibo en el mes de septiembre del año 1925. Continuaron el carisma de San Marcelino Champagnat inicialmente en las siguientes obras:

sun_12x12Colegio Nuestra Señora de Chiquinquirá (Maracaibo, 05-10-1925)
sun_12x12Colegio Champagnat (Caracas, 17-9-1951)
sun_12x12Colegio San José (Maracay, 10-1-1995)
sun_12x12Colegio Juan XXIII (Cardón, 16-9-1963)
sun_12x12Colegio Hno. Ildefonso Gutiérrez (Maracaibo, 10-9-1966)
sun_12x12Escuela Granja Santa Catalina (Delta Amacuro, 9-1989)
sun_12x12Comunidad Catequista de Tucupita (Delta Amacuro, 2-1-1991)
sun_12x12Comunidad Catequista de Biruaca (Apure, 15-9-1996)
sun_12x12Comunidad Primero de Mayo (Machiques, 08-9-1997)
sun_12x12Casa Provincial (Carcas)
sun_12x12Casa de Acogida (Carcas)
sun_12x12Casa de Formación (Los Teques)
sun_12x12Casa de Convivencias (Los Teques)

Tipos de presencias: Escuelas, colegios, escuelas técnico-profesionales, escuelas granjas, niños de la calle, formación de catequistas, indígenas, lugares de misión, voluntariado, casa de convivencias, movimientos apostólicos.

Necesitamos Hermanos Maristas que quieran seguir a Jesús de Nazaret con radicalidad, porque:
– Muchos jóvenes y niños están pidiendo que se les presente a Jesucristo y se les eduque integralmente.
– Dios sigue llamando a los jóvenes a vivir este estilo de vida cristiana.
– La espiritualidad apostólica marista es un don para el mundo.

“Para mí recibir esa formación para ser animador marista es algo que me importa mucho porque desde hay puedo motivar a jóvenes a seguir el camino de Dios y poder ser Cristo Jóvenes y desde un punto ayudar a las personas que nos necesitan y poder inculcar los valores que se nos han enseñado a transcurso de nuestra experiencia y luchar por lo que queremos” (Isvelys Pabon, timonel en formación 16 años)